Se ha ido el más grande, el que nos hizo ver que el golf era un deporte duro, en el que hay que tener una gran fuerza mental, concentración, que levanta pasiones entre sus seguidores, y que arrastra a las masas hasta límites insospechados. Seve, que siempre ha sido más apreciado en las Islas Británicas que aquí (algo normal en este país de pandereta y envidias), donde se le respetaba y quería, y desde donde a buen seguro, Seve tendrá más homenajes y sentidos reconocimientos que en España.
Esas imágenes de Seve, con su melena a lo Beatles rodeado de gente alucinada, maravillada, emocionada viendo jugar a ese muchacho venido de España y mostrar al mundo entero que España sí podría dar grandes jugadores de golf.
Seve, que con él se inició una carrera meteórica ascensión en la afición por el golf en España y que a partir de él, salieron más grandes jugadores de golf como Olazábal, Jiménez, Garrido, Cañizares, Luna, "el niño"... y consiguieron que el golf sea el segundo deporte con más licencias federativas en España.
Descansa en Paz Seve...
Un saludo.
Salamandra.
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